Estamos expuestos a más de 5.000 anuncios y publicidad cada día. Nos llegan a través de televisión, radio, vallas publicitarias, prensa, redes sociales y hasta desde personas convertidas en influencers que nos hacen llegar el mensaje de las marcas que les pagan. Debido a todo esto sufrimos, debemos de reconocerlo, saturación publicitaria. ¿Qué es la saturación publicitaria? ¿Podemos evitarla? Trataremos de dar respuesta a estos interrogantes.
¿Qué es la saturación publicitaria?
Hace tiempo las marcas se enfrentaron a un panorama más sencillo para cautivar y persuadir a los clientes mediante la publicidad. Con la llegada de Internet, los formatos, canales, estrategias y plataformas se multiplicaron. Además, ya no era necesario invertir grandes cantidades en publicidad, porque había medios totalmente gratuitos para darse a conocer.
Un panorama tan idílico para las marcas en lo que a reducir gastos de publicidad se refiere trajo también algunos inconvenientes. El más importante: la saturación publicitaria.
La saturación publicitaria es el exceso de anuncios y comunicaciones publicitarias que las marcas lanzan a los usuarios y que, por norma general, producen el efecto contrario al esperado.
Hay algunas formas de evitar la saturación publicitaria y es de lo que vamos a hablar en el siguiente punto.
Formas de evitar la saturación publicitaria
Tratándose de canales de comunicación tan directos con los usuarios es normal caer en el exceso. Al final las marcas compiten por captar la atención de los consumidores y en su lucha, acaban por saturar y cansar.
Sin dejar de lado los impactos publicitarios, hay formas de evitar la saturación publicitaria. Podemos decir que 3 son las más importantes: sencillez, creatividad y frecuencia.
Sencillez
En publicidad, la tendencia que lleva acompañando a las marcas durante años es la de menos es más. En realidad los mensajes sencillos, que cuentan con lo necesario para impactar en los consumidores, son los más efectivos porque despiertan un interés real en los consumidores.
Creatividad
Podría decirse que es el ingrediente principal de la publicidad y uno de los antídotos ante la saturación publicitaria. Ideas disruptivas, piezas originales y pensar fuera de la caja se presentan como remedios para impactar positivamente en los consumidores.
Frecuencia
Como no se puede especificar una frecuencia de anuncios ideal, lo justo es tener en cuenta el sector o la naturaleza del negocio para establecer una frecuencia publicitaria que no sature.
Con estos 3 ingredientes combinados de forma precisa, conseguimos evitar la saturación publicitaria.
¿Qué hacer ante la saturación publicitaria?
Ya que la inversión en publicidad cada vez es mayor, lo más probable es que esta situación siga en aumento en vez de estabilizarse. Por lo tanto, ya que no podemos evitar que nos lleguen anuncios por todos los flancos, lo que debemos hacer es minimizar los daños.
Los métodos más clásicos no se encuentran tan saturados y cuentan aún con la confianza de su público, por eso es buen momento para apostar por ellos y no renunciar a sus innumerables beneficios.
Está demostrado que la saturación publicitaria no se suele manifestar en las acciones de marketing directo, más bien, reside en los medios de comunicación online, las redes sociales y los spots televisivos.
Es por ello que realizando acciones de buzoneo inteligente, una de las técnicas más efectivas de marketing directo y que no debe de obviarse en ninguna estrategia de publicidad, se puede llegar al público de una manera menos invasiva.
Además, el buzoneo cuenta con la gran ventaja de la segmentación. Las campañas son previamente estudiadas y no van dirigidas a una masa genérica de público, por lo que se evita la saturación publicitaria. Se enfocan a un target potencial que tiene interés por lo que la compañía ofrece, por lo que el ruido y el spam se reducen considerablemente.
En Geobuzón contamos con una amplia red de trabajadores que te ayudarán a enfocar y dar visibilidad a tus campañas para que no se queden en la odiada papelera. Las herramientas de geomarketing juegan aquí un papel clave para poder tomar las decisiones más acertadas y alcanzar un retorno óptimo de la inversión. Confía sólo en los profesionales y ¡no te la juegues!
